Templo católico de Zarcero
El viaje desde mi casa tomó cerca de tres horas, aunque no era necesario, porque para llegar a Zarcero se necesitan no más de dos horas pero por atender la sugerencia de un amigo para que siguiéramos una ruta que, según el, era expedita, resultó ser todo lo contrario.
En todo caso, no fue del todo inútil el largo trayecto porque, por lo menos me sirvió de paseo, conocí rinconcitos adorables de mi país en los que jamás había puesto un pie.
Un detalle agradable, fue que como íbamos con José Luis, el maestro de obras y Don Antonio, el soldador, ellos -como acostumbran tomar una merienda a la media mañana- decidimos invitarlos a tomarla en el mercado de Naranjo, lo que resultó fantástico, porque eligieron una pequeña sodita donde cada bocado fue un manjar de reyes, salimos muy satisfechos.
En estos mercados de mi país, se come delicioso y baratísimo, además de que se entra en contacto con situaciones muy sencillas y agradables de la vida diaria de trabajadores agrícolas y ganaderos, de comerciantes y personal de servicios.
Tenía años de no visitar Zarcero, no recordaba lo hermoso del paisaje ni la belleza de su parque central, un parque cuyos árboles de ciprés han sido modelados en forma de animales de todo tipo por el Sr. Evangelista Blanco Brenes desde hace décadas, quien delegó -recientemente- este trabajo a su hermano Benedicto, que fue con quien pudimos conversar unos minutos, gente muy agradable, sencilla y trabajadora.
Benedicto Blanco Brenes
Evangelista Blanco Brenes
Los hermanos Otoya nos encontraron en el parque y luego de unos minutos de plática nos invitaron a visitar uno de los invernaderos que construyeron recientemente. Fueron generosos en la información que no suministraron y quedamos con Gerald, el hermano menor, me imagino, en que visitaría el nuestro para asesorarnos en la etapa final de la construcción.
Hoy jueves, dos días después de nuestra visita a Zarcero, topamos con la agradable y oportuna sorpresa de que Gerald nos visitó; de nuevo, fue tan generoso y eficiente como lo fue durante nuestra visita.
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